Corea del Sur informa que Corea del Norte ha lanzado un misil balístico de corto alcance hacia las aguas de la costa oriental de la península coreana. El lanzamiento tuvo lugar desde la zona de Pyongyang alrededor de las 22:38 hora local del domingo, y el misil voló aproximadamente 570 km antes de caer al agua, según el Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur.
El Estado Mayor Conjunto califica este acto como una «clara provocación» y una violación de la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU. En respuesta, el ejército surcoreano ha elevado su nivel de alerta y se mantiene completamente preparado. Además, se comparte de manera estrecha la información sobre el lanzamiento del misil con Estados Unidos y Japón.
Tras el informe de Seúl, la agencia estatal norcoreana KCNA difunde una declaración del portavoz del Ministerio de Defensa de Corea del Norte, condenando lo que considera «provocaciones militares temerarias» por parte de Estados Unidos y Corea del Sur. El portavoz menciona la reciente reunión del Grupo Consultivo Nuclear en Washington, donde se anunció el establecimiento de un sistema de disuasión ampliado para el próximo año y la realización de maniobras militares conjuntas a gran escala en agosto.
Corea del Norte advierte que cualquier interferencia de Estados Unidos en sus «activos espaciales» será considerada como una «declaración de guerra». Además, el portavoz critica la llegada del submarino de propulsión nuclear estadounidense USS Missouri a Corea del Sur, acusando a Washington de conspirar para desencadenar una guerra nuclear.
Ante esta situación, Corea del Norte afirma que no pasará por alto la introducción de medios estratégicos nucleares en la península coreana por parte de Estados Unidos, y que esta acción va en contra de la aspiración regional e internacional de distensión, paz y estabilidad. El portavoz advierte que la situación crítica presiona a sus fuerzas armadas para considerar contramedidas más ofensivas.