El premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa, de 86 años, se encuentra ingresado en una clínica de Madrid a causa de «algunas complicaciones relacionadas» con el COVID-19, pero «evoluciona favorablemente».
En un breve comunicado publicado en Twitter, sus hijos Álvaro, Gonzalo y Morgana aseguraron este viernes que están junto a su padre y que, gracias al tratamiento, se encuentra mejor.
«Él y su familia agradecemos las muestras de cariño que estamos recibiendo y rogamos a la prensa que respete su privacidad», concluye el mensaje.
El ingreso del escritor hispano-peruano se produjo «hace unos días» tras complicarse su situación debido al COVID-19, que ya le había obligado a permanecer aislado en su casa de Madrid.
Por ese motivo, la Real Academia Española (RAE) aplazó el acto previsto para el martes pasado, en el que Mario Vargas Llosa iba a conversar con el director de la entidad, Santiago Muñoz Machado, sobre su libro «Cervantes» y que iba a marcar el inicio de la Semana Cervantina, con motivo de la entrega del Premio Cervantes.
El acto, que se había aplazado en un primer momento hasta el próximo lunes, se celebrará finalmente el 25 de mayo, según confirmaron fuentes de la RAE.
Vargas Llosa (Arequipa, Perú, 1936) tiene, además del Nobel concedido en 2010, otros reconocimientos como el Cervantes en 1994 y el Príncipe de Asturias de las Letras en 1986, y es autor de obras como «La ciudad y los perros» (1963) y «La fiesta del Chivo» (2000).