«Yellow», una tortuga de treinta años que hace quince llegó al acuario Sea Life de Benalmádena, Málaga, procedente de las Islas Caimán, hizo su predicción y eligió al equipo que ganará la Champions League 2021-2022. ¿De quién se trata?
Según «Yellow», el Liverpool ganará la final ante el Real Madrid este sábado, en el partido que se jugará en París.
Los cuidadores de la tortuga le prepararon dos recipientes separados unos dos metros con una hoja de brócoli en cada uno -que representaba a cada equipo- y, al descender dentro del estanque, «Yellow» se dirigió a su lado izquierdo, donde se encontraba la imagen del Liverpool.
Al peculiar momento acudieron con gran expectación visitantes del acuario, y diversos medios de comunicación para comprobar si el don adivinatorio de «Yellow» es un mito o una realidad, algo de lo que se podrá salir de dudas a partir del sábado, cuando se lleve a cabo el partido.
La tortuga aspira a convertirse en el alumno aventajado de otros animales visionarios como el pulpo «Paul», que saltó a la fama en 2010 tras predecir correctamente ocho partidos del Mundial de 2010, entre ellos la victoria de la Selección de España sobre Holanda en la final que se jugó en Johannesburgo (Sudáfrica) un 11 de julio.
La directora de mercadotecnia de Sea Life Benalmádena, María Morondo, señaló que «Yellow», que pesa más de 100 kilos, es «la estrella del túnel jurásico» y muchos visitantes preguntan por él, aunque espera que en esta ocasión el animal se equivoque para que gane el Real Madrid.
La elección de «Yellow», que merodeó durante varios minutos ambas hojas de brócoli sin decantarse por ninguna en un claro síntoma de que será una disputadísima final, ha dejado contrariados a los trabajadores del acuario, que esperaban que la tortuga escogiera la comida con la imagen del conjunto español.
El galápago, que se encuentra en el acuario desde 2006, predijo otros resultados como los cuatro partidos que la Selección de España jugó en el Mundial de Rusia 2018 -siempre decantándose a favor del combinado nacional demostrando el amor por los colores- y, aunque nunca ha errado, varios de esos partidos terminaron en empate.